La historia de MTG en El Salvador II

Tiempo de continuar con la historia, hablaba de un cybercafé en Jardines de Guadalupe, que a mi conocer fue el primer lugar donde se vendió magic en el país, y su ubicación tuvo mucho que ver en formar uno de los primeros, sino el primer grupo de personas que jugaba. Y nos reuniamos los viernes por la noche, como FNM, pero sin saberlo, a jugar, a cambiar (que era la única manera de conseguir cartas 'singles'), y a veces, cuando había, a comprar boosters, estabamos limitados a 2 boosters por persona, por que la cantidad era demasiado escasa.

The dark ages.
La siguiente era fue la era oscura, el cybercafé dejó de vender, y todo lo que había era gente que traía cajas para vender, y había que conocerlo, caerle bien y llegar temprano para poder comprar, a veces la gente se reunía en el mismo cyber, o en casas particulares. No había torneos, no había lugares, no habían cartas. El único lugar que nos daba un poco de luz era Avalón, la tienda de comics, tarjetas y figuras de acción, pero aún ahí nunca tenían.

Hasta que un día, recibí una llamada...

Amazing Times.
La llamada era del personal de Avalón, que querían convocar a todos los jugadores para reunirnos un domingo en la tienda. Era la oportunidad perfecta para concentrar a los que jugabamos y retomar las reuniones de antes, y algo aún mejor ocurrió.
Dos empresarios se habían dado a la tarea, no sólo de vender, si no también de organizar a la comunidad de Magic en el país, y ese era el primer llamado a los jugadores viejos, esto dió paso a una de las mejores épocas de Magic, tanto personalmente, como para los jugadores del país.

Empezamos con reuniones los viernes en Galerías, Arenas e incluso el primer pre-release, el de Mercadian Masques, ellos traían las cartas y las vendían donde hubiera gente que les comprara, hacían torneos en la casa de uno de ellos los sabados, y los torneos pre-release seguían creciendo, cada vez más y más gente se metía a jugar, y todo era bueno.

Los negocios empezaron a ir mejor, y para Invasión, se tuvo algo que, a mi entender, en ningún país vecino de CA se ha tenido, un PTQ (Pro-Tour Qualifier), deben de imaginarse el crecimiento para que la compañía que maneja Magic autorizara y diera un espacio en el PT para un jugador de un país tan pequeño.
Luego de eso vino nuestro primer y único nacional avalado por Wizards, un evento que pintaba para ser de proporciones épicas, con torneos pre-calificatorios, es decir, todo el que quería jugar en el nacional, tenía que jugar en uno de estos para ganarse un espacio. El torneo iba a ser en Galerías, pero no en el food court ni nada, iba a ser en la plaza en frente de la casona (para aquellos que no conozcan, Galerías es un centro comercial construido alrededor/sobre una casa antigua enorme), iba a haber pantallas gigantes para los "featured match", y premios que incluían desde cartas, trofeos, binders, hasta las 3 invitaciones para formar el equipo nacional de Magic de El Salvador, donde teniamos la invitación a Worlds en Canadá y $1000 por cabeza.
Era el sueño de todo jugador semi-competitivo.

El día negro
Algo debíamos, o el pacto con quien se haya hecho se acabo. El mismo día que Magic en El Salvador tomaba su paso definitivo hacía la madurez, fue el mismo día que cayó en un foso, del cual a mi opinión, no se ha podido levantar.
Por razones que escapan a mi conocimiento, decidieron arriesgar a toda una comunidad por una ganancia mínima, y perdieron todo lo que se había construido tan bien,... tan rápido. Todo colapso ante la mirada inútil de todos aquellos que mirabamos, que disfrutabamos el juego, el ambiente, la competencia.
Aquel día infame significó la perdida del status de los jugadores, el status del país, de las invitaciones y beneficios, torneos futuros y en general el reconocimiento de la gran compañía al pequeño país.
Dejando aparte las pérdidas personales que acarrearon ese día, es el aislamiento y abandono lo que más nos impacta, puede ser que nunca se hiciera un GP:Centroamerica, o que un compatriota llegara a un invitacional, en lo que estamos claro es que nunca lo sabremos.

Tiempos modernos
Después de eso, MTG en El Salvador, perdió el ímpetu, muchas tiendas abrieron, la principal tienda tenia 3 sucursales, MTG no moría, es mas, crecía, pero no avanzaba. Puede sonar contradictorio, pero a lo que me refiero es que crecía horizontalmente, lo cual es excelente, y es totalmente crédito de las tiendas, de los carteles, de los mismos jugadores que se daban la tarea de traer nuevas caras al ruedo; pero no crecíamos verticalmente, eramos el país que tiene que viajar a un país vecino para jugar un pre-release, y no es que haya algo malo con eso, pero... ¿porqué no tener uno propio?.
Tiempo después la tienda principal cerró, otra abrió, otra cerró y otra abrió. Y así hasta estabilizarnos. Actualmente son dos tiendas las que sirven como distribuidoras y organizadoras, y debo de decir que la situación a mejorado, 90% del tiempo hay disponibilidad del producto, hasta hace poco, los costos se habían mantenido bajos, hay sleeves, dados, tokens, counters, deck boxs en stock, el mercado de las singles a crecido sin par, gracias a la inyección de cartas por parte de personas que compran singles y las revenden aquí.
Se tienen torneos semanales de T2, de Legacy y eventuales de release, extended, two-headed giant y algún día, pronto espero, torneos T1. Pero lo más importante, se ve la competencia, la innovación. Estamos mejorando como jugadores, como individuos, los rankings son más altos, las colecciones son más completas, incluso hay equipos, grupos que comparten cartas, gente que lee los articulos internacionales; el campo está fértil, y la semilla ha crecido, esperemos que el soporte llegue.

La historia de MTG en El Salvador I

Como es conocido, mtg empezó en 1993 iniciado por Richard Garfield..., y bueno, eso no nos interesa en esta particular lección de historia, sino los orígenes aquí en el país. Puede ser que no mencione todos los eventos críticos que ocurrieron, ya sea por que no me acuerdo, o no los viví, así que si tiene más información, queda invitado a complementar.

Con las introducciones fuera del camino, comencemos con esta historia...

Yo conocí el juego en marzo de 1998, cuando acompañaba a mi madre a una visita donde una amiga, suena extraño, pero déjenme continuar; en esa casa vivía un ser peculiar, me parece adelantado a su tiempo, que le gustaba todo tipo de juegos de PC, el súper y nintendo en aquel tiempo y unas caricaturas extrañas, con ojos enormes, cuerpos largos y delgados, y sobre todo violentos, conocidos ahora como anime.

Esta persona es Jorge Ramos, y ambos coleccionábamos tarjetas de los X-Men, de Marvel en general, entonces nos reuníamos a cambiar, y a que él me enseñara su colección 100 veces más completa. Pues un buen día, sacó una cajita y me dijo, "mirá estas tarjetas, te voy a enseñar a jugar", el entrenamiento fue el siguiente:

"...estas son tierras, estas criaturas y estos, hechizos, todas cuestan algo
excepto las tierras, esas sirven para pagar, se trata de matar al otro (como
todo buen juego que se respete) con tus criaturas y hechizos..."

"...sacó una cajita y me dijo: mirá estas tarjetas..."

Después me entregó el manual y me fui a mi casa emocionado, había visto finalmente el matrimonio entre las tarjetas y un juego de estrategia, al día siguiente, y armado sólo con el manualito, convencí a un buen amigo mío, Gabriel Hasbún, que empezáramos a jugar. Deben de imaginarse del brillo que debían haber tenido mis ojos para convencer a alguien, no solo de jugar si no de gastar 100 colones basándome solamente en un manual de como se jugaba. Al final nos decidimos y gastamos 150 colones cada uno, comprando un starter de Portal:2nd Age más medio tournament box de 5ta Edición, y no podíamos estar más alegres.

Está de más mencionar que sufrimos lo que se conoce como "timada bautismal", que es cuando tu padrino (osea quien te enseñó a jugar) te cobra diezmo, sacándote las cartas buenas y dándote sierpes o bestias 4/4 o mayores, y, otra vez, no podíamos estar más alegres.

Abrí mis cartas, y la verdad no recuerdo nada extraordinario, pues todas me parecían la gloria, no había diferencia de poder, color, coste, todas las cartas hacían algo, y yo quería hacerlo todo. Todo eso cambió 30 min más tarde, cuando mi amigo me enseñó una aberración de la naturaleza, era un monstruo con 7 de espadita (poder si son muy jóvenes) y 6 de escudito (defensa), era lo más grande que había visto, y estaba seguro que era lo más grande que existía, y no bastando con eso, decía: "La Sierpe Abrazoletal puede asignar su daño de combate al jugador defensor en vez de a la(s) criatura(s) bloqueadora(s)". Te rompe el corazón...

Como era de esperarse, jugabamos como todos aquellos que empiezan a jugar, sin tener idea de que otras cartas existían, ni que 60 cartas era el número mínimo de cartas para un deck, ni de expansiones, sólo contaban las cartas que cada uno tenía y cada booster tenía cartas nuevas, no sabíamos cual carta era más rara, y solo cambiabamos basándonos en si me gustaba o no sin listas de precios, y todo se jugaba en la primera fase.

Luego seguimos comprando poco a poco, a 25 colones el booster, compramos Tempest, Stronghold y 5ta. En esos tiempos era común que las cartas escasearan, y venía una o dos cajas al mes. Al principio se las comprabamos a Jorge Ramos, que sólo Dios sabe de donde las sacaba, luego nos enteramos que las compraba en un cybercafé en Jardines de Guadalupe... lo cual deja sentadas las bases para la segunda parte de nuestra historia.

Magia en un pequeño país

Bueno, decidí finalmente crear un espacio en línea donde pueda compartir ídeas, comentarios, y experiencias sobre este pseudo-deporte que es Mtg, y ojalá se convierta en un punto de partida para que otras personas se involucren de esta u otra manera al "ruedo".

Bienvenidos.